En marzo de 2025, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró que planea establecer un nuevo conjunto de aranceles llamado «The Big One», que afectará a varias naciones, entre ellas la Unión Europea, México, Canadá, China y Japón. Esta decisión es parte de su política comercial para abordar lo que él llama prácticas comerciales desleales de estos países. La introducción de estos aranceles ha suscitado inquietud en todo el mundo por su posible efecto en la economía global.
En marzo de 2025, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció su intención de imponer una nueva serie de aranceles denominada «The Big One», dirigida a varios países, incluyendo la Unión Europea, México, Canadá, China y Japón. Esta medida forma parte de su estrategia comercial para corregir lo que considera abusos comerciales por parte de estas naciones. La implementación de estos aranceles ha generado preocupación a nivel mundial debido a su potencial impacto en la economía global.
La economía mundial ya enfrenta desafíos significativos. Según el Fondo Monetario Internacional (FMI), se proyecta un crecimiento global del 3,3% tanto en 2025 como en 2026, por debajo de la media histórica del 3,7% . Por su parte, el Banco Mundial espera un crecimiento del 2,7% para el mismo período, similar al ritmo de 2024, pero advierte que esta tasa es insuficiente para lograr un desarrollo económico sostenido
La Reserva Federal de Estados Unidos ha manifestado inquietud por la creciente incertidumbre económica resultante de estas políticas comerciales. Aunque ciertos analistas argumentan que la economía estadounidense podría soportar los efectos a corto plazo, otros señalan que las consecuencias podrían ser más profundas y durar más tiempo.
La Reserva Federal de Estados Unidos ha expresado preocupación por el aumento de la incertidumbre económica derivada de estas políticas comerciales. Aunque algunos analistas sugieren que la economía estadounidense podría resistir los efectos a corto plazo, otros advierten que las repercusiones podrían ser más profundas y prolongada.
La comunidad internacional observa de cerca las acciones de la administración Trump, esperando que se busquen soluciones diplomáticas para evitar una escalada en las tensiones comerciales. La cooperación multilateral y el respeto a las normas comerciales internacionales serán fundamentales para mitigar los riesgos asociados a esta nueva ronda de aranceles.